miércoles, 6 de febrero de 2013

Capítulo 11 - TARDE DE JUEGOS -

*NARRA LOUIS*

Seguimos hablando y riendo un rato hasta que se me ocurrió una cosa.

-          ¿te arrepientes de haberte pedido el helado de caramelo?
-          No
-          Eso es porque no has probado el de chocolate.
-          Dame un poquito.
-          Vale – le acerqué el helado para que lo probara pero cuando iba a probarlo lo levanté manchándola la nariz de chocolate.
-          Louis tramposo. Ahora me has manchado.
-          Espera que te lo quito. – cogí una servilleta y le limpié la nariz cuidadosamente como si se fuese a romper.
-          ¿me vas a dar ahora un poquito?- dijo cuando acabé de limpiarla la nariz poniendo morritos de suplica.
-          Venga vale – esta vez le acerqué el helado para que lo probase pero en vez de mancharla la nariz retiré el helado con rapidez pero me manche parte de la cara.
-          Jajaja eso te pasa por tramposo, espera que te lo quito – dijo pero en vez de coger una servilleta recogió el hilito de chocolate que se había formado con su dedo suavemente. Empezó a la altura del pómulo y siguió la línea de chocolate hasta que acabó peligrosamente cerca de mis labios. El roce de su piel sobre la mía me estremeció y mi cabeza pidió a gritos que ese hilito de chocolate no se acabase nunca para que no separase su piel de la mía nunca. Ahí fue cuando me di cuenta de que me gustaba esa chica, me gustaba mucho.
-          Separó su dedo manchado de chocolate y chupó el chocolate que se había quedado en su dedo con dulzura y picardía. - Si que esta rico tu helado, si.
-          Te lo dije.

Nos quedamos unos instantes hasta que se tumbó en la hierba y la seguí.
Nos quedamos mirándonos hasta que pegó un bote y se sentó de golpe como si acabase de acordarse de algo. Me asustó y me senté tan rápido como pude.

-          ¿Qué pasa? – pregunté un poco preocupado.
-          Nada, ¿te apetece jugar a un juego?
-          Vale, me encantan los juegos. ¿Qué hay que hacer?
-          Preguntas  

*NARRA PATRI*

Se me había ocurrido la manera perfecta de hacerle preguntas un poco más comprometidas y que tuviese que contestar si o si.

-          Pero te aviso no son preguntas normales y hay que responder con la verdad, pero solo son preguntas de si o no.
-          Vale pero por ser el nuevo empiezo preguntando yo – dijo mostrando su preciosa sonrisa.
-          Vale
-          ¿tienes novio?
-          No
-          Mejor porque me daba miedo meterme en problemas por hacer esto – y volvió a intentar mancharme con el helado pero me retiré a tiempo.
-          Has fallado. Me toca ¿tienes novia?
-          No – no se pero me sentí muy aliviada.
-          ¿tienes algo que hacer mañana?
-          No
-          ¿me dejas que te secuestre?
-          Ahora me toca preguntar a mí. ¿tienes alguna chica en mente?
-          Se podría decir que si – ese comentario me entristeció tanto que temí que alguna lagrimilla traviesa quisiese escapar de mis ojos. Decidí sonreír porque él no podía notarlo. Al fin y al cabo esta por otra chica no podía dejar que supiese que estaba empezando a sentir algo por él. En ese momento me había arrepentido de empezar a jugar a lo de las preguntas.
-           ¿A sí?
-          Si pero no creo que ella sepa nada de mí, ella supongo que me considera un chico majo con el que reírse.- se le entristeció un poco el rostro y decidí intentar ayudarle con aquella chica. Por mucho que me doliese el no sería mío. Deseche es pensamiento lo antes que pude, le conocía de hacía tres días y me negaba a creer que me estuviese enamorando otra vez.
-          Pues entonces más o menos como yo, el chico sabe que existo pero no me ve más que como a una amiga como mucho.
-          Anda que, que panorama los dos – dijo agachando en la cabeza.

*NARRA LOUIS*

Aquella frase se me clavó en la mente como un cuchillo, al fin y al cabo estaba enamorada pero no era de mí. Volví a intentar sacar ese pensamiento de la cabeza pero era u poco raro porque solo la concia desde hacían 3 días desde que la vi dormida con esa cara de ángel en el avión.
Nunca iba a olvidar esa primera imagen suya y el pinchazo que sentí en el pecho. Intenté alejar todos eso pensamientos de mi cabeza porque sabía que ella nunca sería mía. Me conformaría con ser su mejor amigo.

-          Ahora me toca a mí. ¿me dejas que te secuestre mañana?
-          Por supuesto- sonrió y volvió a dejarse caer sobre la hierba hasta que se quedó completamente dormida.
La miré como si solo pudiese romperse con una mirada y la acaricié el pelo. Ella apoyó su cabeza sobre mis piernas y la acaricié el rostro sopesando mis posibilidades para mañana. Estuve pensando un rato hasta que se me ocurrió una idea genial.

*NARRA HARRY*

Yo lo sentía mucho por Liam por que Danielle le acaba de dejar pero yo no podía dejar de pensar en Mery y en sus preciosos ojos color chocolate, y en su sonrisa, y en su cuerpo, un momento, ¿me estaba enamorando de esta chica? No podía ser Harry Styles no se enamora. No podía negar que esta chica me atrajese pero tanto como para enamorarme, no sé. Pero si solo me atraía ¿Por qué no podía sacarla de mi cabeza?
Odio cuando dos parte se mi cerebro se pelean por un mismo tema porque me dejan a otra parte en el medio y sin enterarse de nada.

Necesitaba salir a tomar el aire así que le di a Liam una palmadita en el hombro y bajé las escaleras. Cuando llegue al último escalón no podía creerlo, ¡María estaba allí! Estaba con una amiga hablando y riendo con esa preciosa sonrisa que tenía.
-          Harry no empieces otra vez – me dije a mí mismo. Quería acercarme, saludarla y esas cosas pero no podía. Ella no querría verme después del plantón. En ese momento su amiga recibió una llamada y se tuvo que marchar dejándola sola. En ese momento se me ocurrió una idea genial.
Me deslicé fuera de nando´s para empezar el juego.

*NARRA MARÍA*

Irene se tuvo que marchar pero nos dimos los teléfonos y prometimos hacer una noches de chicas lo antes posible porque teníamos muchas cosas de las que hablar.
 Me levanté para salir de allí y antes de dar un paso fuera me llegó un mensaje.

“Ola princesa, siento mucho el plantón así que para recompensarte se me ha ocurrido prepararte un juego. ¿Qué me dices? ¿Juegas con el ricitos?
Harry.”

Acaba de llamarme princesa y no pude sentir una punzada en el pecho al pensar en sus ojos y su sonrisa. Se me dibujó inconscientemente una sonrisa en la cara y le contesté:

“Bueno venga ricitos, ¿Qué tengo que hacer?”

A los dos segundos me llego otro mensaje suyo.

“bieeeen. Vale lo primero que tienes que hacer es salir de nando´s y seguir haciendo caso a los mensajes que un morenazo cañón te está mandando”

“muy creído te lo tienes tu “MORENAZO”, vale haber que quiere el señorito Styles que haga.”

“El que es guapo es guapo princesa ;). Lo primero que tienes que hacer es cruzar la calle y entrar en la floristería. Da tu nombre y te darán algo a cambio.”

Hice caso al ricitos y crucé la calle. Al entrar en la floristería me saludó una mujer mayor con una gran sonrisa.

-          Tú eres Mery ¿Verdad?
-          Si
-          Bueno cariño pues esto me lo acaba comprar un chico para ti.- me tendió una rosa roja – también me ha dicho que te de esto.- me tendió una tarjeta perfumada en la que ponía una dirección.
-          Muchísimas gracias
-          Nada.

Salí de la floristería oliendo la preciosa flor. Me llegó otro mensaje del ricitos al móvil.

“huele bien la flor, ¿verdad? Es casi tan bonita como tú. Creo que eso me ha quedado un poco cursi pero ya no hay marcha atrás. Espero que después de todo esto me perdones porque si no mi venganza será terrible. Súbete a un taxi y da la dirección de la nota.”

Es casi tan bonita como tú, no podía dejar de leer esa frase, ¿se podía ser más mono? Le hice caso y me subí a un taxi y mientras el taxista conducía le mandé otro mensaje contestándole.

“cursi si, un poco pero también es precioso. No sé yo si te perdonaré, todavía me lo estoy pensando.”

Cuando llegué a la dirección le pagué al taxista y me bajé del taxi. Estaba en frente del London Eye. Fue dar un paso y me tropecé con algo blandito que había en el suelo pero conseguí mantener el equilibrio. Cuando agaché la mirada para ver con que me había tropezado vi un osito de peluche con una cajita. Al abrir la caja vi que había dentro muchos bombones y al momento recibí un mensaje.

“flores y bombones un clásico”

Sonreí por ese mensaje y alguien me tapó los ojos. A los dos segundos sentí la acompasada respiración de Harry en mi cuello y me estremecí.

-          Hola preciosa. – susurró en mi oído causando que mis mejillas se sonrojaran. Él lo notó y volvió a susurrar - ¿te pongo nerviosa?
-          No, solo no me lo esperaba.
-          Camina yo te guio. – dijo con su voz grave y seductora en mi oído.
-          Me da miedo caerme.
-          Tranquila que no te voy a dejar caer, al fin y al cabo ya te salvé una vez podría volver a hacerlo. – colocó sus manos en mi cintura, no sin antes colocarme un pañuelo sobre los ojos para que no pudiese ver nada y comenzamos a andar mientras susurraba cosas en mi oído.
-          ¿Falta mucho Styles?
-          No ya hemos llegado - y destapó mis ojos dejándome ver una preciosa imagen desde lo alto del London Eye.
-          Esto es precioso.
-          Siento mucho haberte dejado tirada pero a un amigo le acaba de dejar su novia y necesitaba que estuviésemos con él.

*NARRA HARRY*

Había salido todo a pedir de boca. Estábamos en el London Eye sumamente cerca viendo el paisaje.

-          Siento mucho haberte dejado tirada pero a un amigo le acaba de dejar su novia y necesitaba que estuviésemos con él. – dije pensando en Liam. Es ese momento ella se dio la vuelta quedando enfrente de mí. Sus ojos estaban a escasos centímetros de los míos y sus labios pedían compañía pero en ese instante ocurrió algo muy extraño. Me entró miedo. A Harry Styles le dio miedo besar a una chica. El mismo Harry Styles que no creía en el amor se acababa de dar cuenta de que se había enamorado de una española a la que apenas conocía de un par de horas.
Sentí muchas ganas de besarla pero me acobardé. Me dio miedo la idea de que me rechazara y no volver a verla. Todo esto pasó en decimas de segundo ella depositó un dedo sobre mis labios y susurró:

-          No hace falta que disculpes, estas perdonado Styles.

Volvió a darse la vuelta mirando el paisaje y apoyó su cabeza sobre mi pecho mientras que yo rodeé su cintura con mis brazos pegándola más a mí.

Y así nos quedamos, viendo Londres cada uno pensando en el otro medio abrazados hasta que la cabina tocó tierra y se acabó la magia.
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intrigante ¿verdad? pues seguid leyendo hoy no me enrollo mucho que tengo que estudiar.
KISSES

3 comentarios:

  1. ayy patri no me puedes dejar asii!!!! es muy bonito y espero k subas el siguiente!!

    la corderita

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  2. jhgvbuhvbhjbsjhdvbjhvbjhbfsjhbvjhsf que bonito Harry, olé y olé :)
    Es genial, me encanta <3

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    1. JAJAJA me encantan tus comentarios, tus fanfics, tus blogs y tu. sigue leyendo wappisima que seguro que te hago un hueco en mi novela.
      KISSES

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