Capítulo 45 - AMOR Y ESAS TONTERÍAS –

*NARRA PATRI*

En cuanto terminaron de cantar nos pusimos a aplaudir como unas locas. Era lo más bonito que había hecho por nosotras nunca.

Nos contaron que la canción la habían escrito ellos y todos sabíamos que según cantaban y escribían estaban pensando en alguien.

Estaba claro que Harry y Lou pensaban en Mery y en mí porque éramos sus novias pero Niall, Liam y Zayn no tenían pareja estable. Aún así todos sabíamos que Niall se la estaba cantando a Irene por qué no apartaba de ella sus preciosos ojos azules, ella era la única que parecía no darse cuenta.

Con Nicki y Liam pasaba otro tanto. Liam la cantaba con una preciosa sonrisa mientras ella lo único que había era ponerse roja como un tomate y apartar la mirada.

Entre Zayn y Daniela era diferente. Se notaba que se gustan pero había mucha tensión sexual. Se comían con la mirada  mutuamente pero también se veía que uno estaba por el otro.

-       ¿Te ha gustado? – preguntó Louis abrazándome por la espalada.

-       Es lo más bonito que han hecho nunca por mi – dije dándome la vuelta para mirarle a los ojos.

-       Pues que novios más poco detallistas has tenido.

-       Es que en realidad eres el segundo chico con el que salgo de verdad – dije sonrojándome.

-       Bueno eso da igual – dijo colocando un mechón de pelo tras mi oreja – vas preciosa.

-       Tu sí que vas guapo – dije mirándole de arriba a abajo.

-       Anda si voy lo más normal del mundo – dijo quitándose importancia.

-       Simple but effective – dije riendo.

-       Esa es mi frase – dijo Harry gritando desde la otra punta de la playa.

-       ¿Como lo habrá oído? – dije susurrándole a Louis.

-       Tiene un radar en uno de sus rizos – dijo acercándose más y riéndose.

-       ¿Nos vamos? – pregunté.

-       Si – dijo el besándome y agarrándome la mano – no te separes mucho que con lo guapa que vas fijo que te raptan.

-       No seas tonto – dije dándole en el hombro.

-       Pero si te encanta – dijo sonriendo.

-       Por supuesto – dije besándolo – eres mi tonto.

*NARRA IRENE*

Nos íbamos de fiesta y realmente lo necesitaba para despejarme. Se me estaba viniendo el mundo encima y aunque intentaba estar bien porque quería disfrutar de ese sueño del que Alex formaba parte tenía muchas ganas de llorar.

Niall no me dejaba ni a sol ni a sombra y en parte lo agradecía porque me encantaba estar con él y me levantaba mucho el ánimo evitando que pensara en Alex y haciéndome reír todo el rato. Se notaba que aquel chico estaba dejándose la piel en hacerme sentir bien y aún no llegaba a entenderlo del todo.

Era un chico estupendo y me cuidaba un montón. Me parecía súper sexy pero a la vez me parecía un chico dulce y cariñoso. Tenía unos ojos azules que escandalizaban y que casi siempre que se clavaban en los míos hacían que el mundo dejase de girar y solo existiésemos él y yo. Su sonrisa no era perfecta puesto que llevaba braquets pero para mí era la sonrisa más bonita del mundo.

Sabía que probablemente Niall estuviese empezando a significar demasiado para mí y eso podría hacerme daño pero le quería conmigo cada segundo del día. No podía separarme de él porque realmente no quería. Se estaba muy bien en su compañía y ahora éramos realmente muy buenos amigos.

Solo esperaba que algún día fuésemos más que eso porque necesitaba volver a probar el sabor de esos labios dulces y cálidos.

Algo que yo no sabía es que esos labios volverían a ser míos muchísimo antes de lo que esperaba.

*NARRA LIAM*

Simplemente perfecta. Era una chica que le quedaba bien todo lo que se ponía pero supongo que también influía los ojos con los que yo la miraba.

Iba guapísima con esa trenza de lado, recogiendo todo su precioso pelo rubio. El vestido se le entallaba a la figura mostrando su perfecta silueta y dejando ver sus bonitas y larguísimas piernas.

No podía dejar de mirarla. Tenía algo que hacía que mis ojos se quedasen clavados en ella. Estaba a unos metros de mi mirando la puesta de sol que ahora mismo todos contemplábamos desde la playa. Tenía los ojos brillantes mirando directamente al mar.

No podía sacar de mi cabeza el pensamiento de que hubiese pasado esta mañana si Louis no llega a interrumpir.

Me sentía realmente idiota porque tenía a unos escasos metros a la chica de la que estaba enamorado y no era capaz de decirle lo que sentía. No estaba seguro de que ella sintiera lo mismo y no quería arriesgarme a que le abriese las puertas de mi corazón y ella cerrase el suyo con llave.

-       Vas a coger frio – dije acercándome por detrás y susurrándole al oido al ver que se estremecía.

-       Es que empieza a refrescar – dijo sonriendo sin apartar la vista del horizonte mientras se ponía su chaqueta - ¿Sabes?, voy a echar de menos esto cuando tengamos que volver a Londres. – dijo cruzándose de brazos.

-       ¿Las puesta de sol? – pregunté.

-       Las puestas de sol, la playa, estar contigo… - dijo bajando la voz hasta que se convirtió en un susurro.

-       Yo no me voy a ir a ninguna parte, cuando quieras quedar me llamas y voy a buscarte a donde sea. – dije pasando mis manos alrededor de su cintura para entrelazarlas sobre su vientre.

-       ¿Irías a cualquier sitio? – dijo sonriendo.

-       Donde fuese, como fuese y cuando fuese – dije susurrándola al oido – siempre que me lo pidieses tú.

-       ¿Irías al fin del mundo solo para buscarme? – preguntó girándose y apoyando su frente sobre la mía.

-       Si – dije rotundamente sonriendo.

-       ¿Qué es esto que no está pasando? – dijo sin apartar la vista de mis ojos dejándome apreciar sus preciosos ojos verdes oscurecidos por la falta de luz.

-       No se – dije encogiéndome de hombros – será el amor y esas tonterías que desprenden estos – dije refiriéndome a Harry, Louis, Patri y Mery.

-       Yo tampoco sé lo que es pero me gusta sentirme así – dijo sonrojándose ligeramente y apartando la mirada.

-       Y a mí – dije mientras se acercaba y besaba mi mejilla.

-       Nos están esperando – dijo lanzando una mirada a los chicos que ya estaban saliendo de la playa.

-       Pues será mejor que vallamos – dije besándola esta vez yo en la mejilla.

Cogió mi mano y empezamos a correr por la playa. Sonrientes. Felices. Enamorados.

*NARRA HARRY*

Mery era una chica fantástica y me encantaba estar con ella. No me había sentido así con ninguna chica que se hubiese cruzado en mi camino, y se habían cruzado unas cuantas.

Ella era cien mil veces mejor que todas las chicas con las que he estado juntas y un solo segundo a su lado es muchísimo mejor que cualquiera de las noches que haya pasado con las demás.

Cando mis amigos decían que estaban enamorados y que se sentían mejor que nunca lo veía todo una tontería aun que es verdad que de vez en cuando echaba en falta alguien a quien abrazar.

Ahora sé que se siempre que necesite un abrazo, un beso, una caricia o un te quiero tengo a mi chica, la persona a la que más quiero en el mundo.

Mery estaba muy bien físicamente, y era guapísima pero, sorprendentemente, su físico era lo que menos me importaba.

Esta noche en la discoteca sería diferente pues no tendré que ir buscando a nadie, estará conmigo desde el principio.

Estará riendo conmigo, bailando conmigo, cantando conmigo. Esta noche va a ser mejor que cualquiera de las otras por que tendré a alguien de quien preocuparme a quien querer con toda mi alma.

Quería que fuese mía para siempre y es que el solo pensamiento de verla con otro que no fuese yo me hacía ponerme enfermo.

A mis ojos era una chica guerrera pero también era dulce e inocente aunque en realidad de inocente no tuviese tanto, y me lo demostrase aquella noche.

*NARRA ZAYN*

Nos íbamos de fiesta y me apetecía un montón. En la discoteca habría muchas chicas aunque probablemente yo no podría dejar de mirar a una en concreto.

Daniela iba preciosa con esa camiseta ajustada y corta que dejaba su perfecto vientre plano al aire.

Esta noche tenía pensado hacer algo más que no fuese picarla que era lo que hacíamos el 99,9% del tiempo. Me gustaba esa forma tan especial y sexy que tenía de provocarme pero sobre todo me gustaba lo rebelde que era.

Probablemente la cagaría en el último momento como siempre pero de momento tenía pensado hacer algo. Me costaba mucho hablar con ella y parecía que solo podía hablarla cuando era para picarla.

No la veía como a una chica más porque ella era diferente. No es por hacerme el chulo ni nada pero normalmente no me costaba demasiado conseguir a una chica, tenía mis truquitos, pero sabía que ella no me lo pondría fácil más que nada porque ella no era una chica fácil.

Por eso tendría que currármelo y pensaba hacerlo porque por mucho que me lo currase, merecería la pena si podía ver esa bonita sonrisa otra vez o si podía pasar algún segundo a su lado.

No sabía si estaba enamorado o no porque nunca había sentido nada que se le pareciese pero Dani me estaba haciendo que me plantease muchas cosas.

Dicen que cuando estás enamorado haces cualquier tontería por la persona a la que quieres y no faltaba tanto para sentir en mis carnes el que no me importase lo que me pasase con tal de que ella estuviese bien pues esa noche, en esa discoteca, el destino me iba a poner un reto que lo cambiaría todo.

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Hola amores del alma. Estaba muy romanticona y me ha quedado un capítulo muy pegajoso pero tambien muy dulce. Hoy no tengo mucho más que deciros porque estoy un poco depre y no tengo animo para nada mas. Recordaros lo de siempre, comentad, votad, poned el nombre en los comentarios y disfrutad muy mucho. 

KISSES